Buñuelos de higo para este tiempo de Semana Santa
En estos días de la Cuaresma, las cocinas tradicionales recuperan guisos como el potaje de vigilia o las diversas variedades del bacalao. Los postres o meriendas, de manera inevitable, se resuelven con unas torrijas o unos buñuelos.
En los pueblos y ciudades de la provincia de Castellón estos buñuelos tienen una peculiaridad: los hacen rellenos de higos. Es lo que llaman figues albardaes. Se preparan en Cuaresma y otras festividades de primavera.
Cada ama de casa tiene su receta particular. La más tradicional es la más sencilla. Si queréis hacerlos, sólo tenéis que seguir estas indicaciones:
– Batimos los huevos con el azúcar, y vamos incorporando el aceite, la leche y el anís mezclando bien cada ingrediente antes de añadir el siguiente. Luego ponemos la ralladura de limón.
– Mezclamos la harina con la levadura y la añadimos a la mezcla anterior. Dejamos reposar la masa una hora.
– Ponemos aceite suave en abundancia dentro de una sartén honda y lo calentamos a fuego muy suave. Cortamos los rabitos de los higos. Ponemos un poco de aceite en un bol para humedecer la cuchara cada vez. Así evitamos que la masa se pegue.
– Llenamos una cuchara sopera de masa. Ponemos en medio un higo, y con una cuchara de postre -que también habremos pasado previamente por el aceite- la vamos cubriendo con la masa de los lados hasta tener una bola. La dejamos caer dentro de la sartén con el aceite caliente. No hace falta dar la vuelta a los buñuelos, porque lo hacen solos.
– Cuando los buñuelos estén dorados, los ponemos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite. Tras la última tanda, los espolvoreamos con azúcar.
Ingredientes:
-2 huevos
-100 gr azúcar
-80 ml aceite de oliva virgen extra
-aceite suave para freír los buñuelos
-80 ml leche
-35 ml anís dulce
-ralladura de limón
-300 gr harina de repostería
-15 gr levadura Royal
-1/2 kg higos secos sin enharinar (aunque la cantidad de higos secos depende del tamaño de los mismos. Si son grandes los partimos por la mitad y sólo ponemos medios. Si son más pequeños, conviene mejor ponerlos enteros, con lo que necesitaréis el doble)
-azúcar para espolvorear
Vía: El Món de la Cuina